lunes, 18 de agosto de 2014

Afortunado






Te digo que nunca es suficiente,
el tiempo que pueda pasar contigo.
Tiempo que no me deja indiferente,
pues ya sé que no es tiempo perdido.

A pesar de ser triste la despedida,
momento de cielo nublado,
yo entonces pienso que eres mía,
y el cielo se abre como sí nada hubiese pasado.

Al andar por los jardines de los sueños,
esos que están tan decorados,
otros paseantes me miran con celos
susurrando: "ahí va ese afortunado".

Y cuando descansamos en el tiempo,
los dos tan juntos y apretados,
un ángel nos mira desde el cielo
y suspira: "ahí están los enamorados".

Es como estar en otro mundo,
porque se te olvidan los problemas.
Yo cojo aire con un trago profundo,
y tu apoyada en mi pecho mientras.

Pero es incluso un insulto,
tratar de escribir que representas.
Pues no existen en este mundo,
palabras suficientemente bellas.